sábado, 27 de octubre de 2012

Un partido muy especial



El domingo, tras más de 450 días, se volverá a jugar un Superclásico oficial. Por los puntos. En el Monumental. Desde Cultura Riverplatense, te contamos  nuestras sensaciones en una previa que tiene como protagonista al insomnio.


Nunca fue un partido más. No lo fue en 1908, cuando nos cruzamos por primera vez. Tampoco lo fue cuando el 20 de Septiembre de 1931 terminamos definiendo el encuentro en un escritorio –donde siempre tenes más chapa, obviamente- tras una batalla campal. Menos que menos, lo será hoy.

Nos volvemos a cruzar. Y disculpen que usemos el plural. Es que en esta estamos todos. Todos ustedes, con sus dolorosas cargadas. Todos nosotros, con nuestros huevos/ovarios enormes para soportar el calvario que nos hicieron pasar las últimas dos comisiones directivas. Llegó la hora.

Durante estos 470 días en los que no estuvimos donde teníamos que estar, recordamos miles de anécdotas. Los más jóvenes, como quien suscribe, añoramos la vaselina de Rojas, el taco de Higuaín o la clase de fútbol de Ortega y Buonanotte. Lo más experimentados, recordaran el 5-4 del 72. También el gol de Montenegro en el 86. O los 16 goles de Labruna. ¿Por qué no los dos goles del Beto, en tu cara y en tu cancha, después de dar la vuelta olímpica?

Hoy, es otra historia. Una página más para este grandioso libro de superclásicos. Llegamos a los tumbos, los dos. Como la última vez que jugamos en cancha de River, con el gol de Maidana y un nuevo intento de abandono de tu parte, lanzando miles de bengalas para que el humo tratara de esfumar el baile bárbaro que te estabas comiendo.

El último, en cancha de ustedes, fue el comienzo del fin para nosotros. Un fin que no fue tal, porque una vez más resurgimos cual Ave Fénix para demostrarle al mundo quien es el más grande de la Argentina. Mejor dicho, el más grande de América.

Este partido no entiende de tácticas ni estrategias. O tal vez sí, pero como protagonistas secundarias. El factor psicológico, es fundamental. Y desde allí, los estamos esperando hace mucho tiempo… prepárate, bostero, faltan horas para que nos volvamos a ver.

0 comentarios:

Publicar un comentario