lunes, 22 de abril de 2013

¿Cómo lo explicamos?



Editorial de Cultura Riverplatense sobre el andar de River en estos 10 primeros partidos de la Era Ramón. 20 puntos, seis triunfos, dos empates y dos derrotas. Juego por momentos, actitud por otros y suerte cuando fue necesaria. ¿Está para pelear?

River ganó. Volvió a ganar. Su sexto triunfo en diez partidos. Uno menos que los que consiguió en 19 fechas del Torneo Inicial. Este, fue otro triunfo rimbombante. Al igual que el primero de éste torneo, ante Belgrano en Córdoba. Chivo, para ganarlo con más actitud que fútbol, pero para ganarlo.

No se sabe hasta qué punto confiar en éste River. Metió 9 de 9 en las primeras tres fechas, y cuando comenzábamos a soñar, nos comimos un baile impresionante con un San Lorenzo que no ha tenido un gran papel en la primera mitad del Torneo Final. Entró en una meseta, y salió tras ganarle a Racing. Gran triunfo. Fútbol, toque y show. Un 10 que pareció un 10, un 5 que jugó a un toque y un equipo con dinámica que fue y que vino constantemente. Cuando tuvo que confirmar, se quedó con un empate ante Arsenal que bien pudo ser victoria aunque también pudo ser derrota.

Y ayer… ¿qué decir de ayer que no se haya dicho? River tuvo suerte. Tuvo suerte de no estar 0-1 abajo en los primeros 15 minutos de la primera etapa. También tuvo suerte de que Pitana se equivocara a favor. Puede llamarse suerte, también, que Ibañez se haya equivocado en favor de River y que la pelota le haya caído a Balanta y no a Nico Sánchez.

Pero no fue todo suerte. También tuvo actitud. Y hasta fútbol. Porque en los 10 minutos posteriores al gol del colombiano, River mostró su mejor cara, tuvo la pelota, encontró los espacios y de no ser por la polvora mojada de sus delanteros, pudo haberse puesto 3-1 y sentenciar la historia.

Entonces, ¿cómo explicamos a este River? ¿Cuál es su mejor argumento para sostener que peleará el torneo hasta las fechas finales? No lo sabemos. Mejor dicho, sí. Ramón Ángel Díaz. Así se puede resumir todo. Su mayor argumento y su mejor razón para esta actualidad y para el sueño de lo que viene.

No es éste River, el Barcelona, al lado del River de Almeyda. Juega mejor, y con otra actitud, es cierto. Pero tampoco es una bestialidad. Sin embargo, ¿cómo explicamos que éste River ya haya ganado un partido más que el River de Matías en sus 17 fechas del Torneo Inicial? Sencillo: Ramón Ángel Díaz.

Absorbe presión, tiene tacto, muñeca, espalda y culo. Y disculpen el vocabulario, pero como se explica entonces que en la primera fecha haya puesto a Funes Mori y Luna para cerrar el partido, y que el resultado inmediato haya sido una peineta del primero para habilitar al segundo que definió de gran manera ante Olave. Es tacto, es muñeca y también es culo. ¿Cómo explicamos el cambio de Ledesma? Es el mismo Ledesma que hace 8 7 partidos no daba pie con bola, y es el mismo que hoy pasa a ser el equilibrio de todo un equipo. ¿Qué es eso si no es espalda para bancar a un jugador resistido durante 6 partidos seguidos y terminar mirando al público para decir ‘vieron que tenía razón…’?

No hay otra explicación. Al menos, no se le ocurre a este cronista. Ramón Díaz ha traído a River lo que se extrañaba. La paz para creer en un proyecto. Un proyecto a largo plazo que en el corto, ya te deja buenas sensaciones. No sé sabe si River peleará el campeonato, lo que sí se sabe, es que éste es otro River, y por qué tiene nombre y apellido: Ramón Ángel Díaz. 

0 comentarios:

Publicar un comentario